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8 de marzo de 2019

¿Cómo se distribuye nuestra memoria en el cerebro?

En el estudio de la memoria, se ha producido un cambio de paradigma: el paso de la teorías modulares del cerebro a los modelos de redes neuronales. También, el paso de modelos experimentales que pretendían localizar la memoria en áreas cerebrales muy concretas a otros modelos que consideran la memoria como una propiedad de todas las redes y sistemas neuronales. En paralelo se han descubierto redes neuronales- nodos- específicas para diferentes tipos de memoria y se han propuestos modelos de arquitectura neuronal que recogen tanto las características de los sistemas neuronales interactivos y distribuidos por todo el cerebro como las características de los de dominios corticales más propios de memorias concretas.

El neurocientífico Joaquín Fuster fue uno de los primeros en cuestionar la teoría modular del cerebro. Para este autor, la memoria surgía de la "gran red que es el cerebro" y propuso un nuevo paradigma para explicar cómo funciona la memoria. Estableció tres principios:
- El primer principio, las memorias son redes de neuronas interconectadas, distribuidas por la corteza cerebral.
- El segundo principio, propone un modelo jerárquico que organiza los diferentes tipos de memoria en dos grandes grupos en función de si se encargan de guardar la información sensorial- memoria perceptiva- o bien por las áreas motoras, responsables de la conducta, del "hacer" - memoria ejecutiva-.
- El tercer principio, es que una sola neurona o grupos de neuronas puede formar parte de muchas memorias y que pueden encontrarse en cualquier punto de la corteza cerebral. De ahí, las redes neuronales estén superpuestas y entrecruzadas y que sus extensiones e interconexiones puedan llegar a ocupar amplias regiones del córtex.

En los dos tipos de memoria, que propone en su paradigma, la memoria perceptiva y la memoria ejecutiva, podemos distinguir diferentes subtipos ordenados jerárquicamente. Con respeto a la memoria perceptiva, están repartidas principalmente por la corteza- lóbulos temporales, parietales y occipitales- e incluyen las experiencias sensoriales, todos los recuerdos y conocimientos adquiridos por estas memorias perceptivas. Desde el punto de vista jerárquico, la memoria perceptiva va desde lo sensorial a lo conceptual en general. Con respecto a la memoria ejecutiva, están distribuidas  sobre todo por el córtex frontal. Incluye conocimientos y el recuerdo de acciones adquiridas por la experiencia al actuar sobre el entorno físico y social. En el nivel inferior reside la corteza motora primaria, que es la memoria motora filogenética, encargada de coordinar los movimientos más simples, aquellos que son innatos y producto de la evolución, y sobre ello se formarán las distintas memorias motoras y ejecutivas del individuo. En el nivel superior, hallaremos los planes de conducta, la creatividad y las decisiones. Ambas memorias se retroalimentan en el denominado "ciclo percepción- acción". En este ciclo, recibimos unos estímulos perceptivos que procesamos y a través de los cuales ejecutamos unas acciones que modifican nuestro entorno. Estos cambios producirán a su vez nuevas percepciones que generaran nuevas acciones. Y así, incesantemente.